Consecuencias del abuso sexual infantil

La agresión más mortífera de todas las agresiones posibles es la mutilación del espíritu de un niño, porque destruye el principio vital de la confianza.

Erik Erikson

En 1997, el sociólogo estadounidense Simon David Finkelhor conocido por su investigación sobre el abuso sexual infantil y director del Centro de Investigación de Delitos contra Niños, señaló que cuando un niño o una niña es víctima de abuso sexual experimenta los siguientes efectos:

En la sexualización traumática, se explicaría en como el abuso interfiere en el desarrollo normal de la sexualidad del niño. Pues éste aprende a usar determinadas conductas sexuales, como estrategias para obtener beneficios o manipular a otros, recibe una distorsión de la importancia y del significado de conductas sexuales, así como para establecer relaciones de intimidad e integrarlas a sus esferas afectivas y eróticas.

No solo se limita al agresor, sino que la amplía a otros círculos.

Se traduce en culpa, vergüenza, pérdida de valor, y todos estos sentimientos los incorpora a su autoimagen el niño/a, lo cual mina a gran escala su autoestima. En algunos casos la estigmatización se expresa en conductas de drogadicción y prostitución.

El niño cree que no sabe reaccionar ante las diversas situaciones planteadas en la vida real, no tiene la sensación que tiene control sobre sí mismo/a y de qué es lo que realmente sucede. Lo cual provoca desamparo, temor al futuro, y por tanto actitudes pasivas y poco asertivas, así como retraimiento.

En la sexualización traumática, se explicaría en como el abuso interfiere en el desarrollo normal de la sexualidad del niño. Pues éste aprende a usar determinadas conductas sexuales, como estrategias para obtener beneficios o manipular a otros, recibe una distorsión de la importancia y del significado de conductas sexuales, así como para establecer relaciones de intimidad e integrarlas a sus esferas afectivas y eróticas.

No solo se limita al agresor, sino que la amplía a otros círculos.

Se traduce en culpa, vergüenza, pérdida de valor, y todos estos sentimientos los incorpora a su autoimagen el niño/a, lo cual mina a gran escala su autoestima. En algunos casos la estigmatización se expresa en conductas de drogadicción y prostitución.

El niño cree que no sabe reaccionar ante las diversas situaciones planteadas en la vida real, no tiene la sensación que tiene control sobre sí mismo/a y de qué es lo que realmente sucede. Lo cual provoca desamparo, temor al futuro, y por tanto actitudes pasivas y poco asertivas, así como retraimiento

¿Por qué los menores
no suelen contarlo?

Una de las preguntas más frecuentes que solemos hacernos es porqué los menores no suelen hablar de los abusos cuando les está sucediendo. Se debe a un fenómeno conocido como Síndrome de Indefensión Aprendida, que el psicólogo Jorge Bucay narra de forma muy visual en su relato del Elefante de Circo.

Si deseas escuchar el relato, haz clic en la siguiente barra (duración 4'23")

Efectos del Síndrome de
Indefensión Aprendida

Impotencia

Las víctimas de abuso sexual generan un fenómeno de indefensión aprendida, ya que sus intentos por evitar el abuso resultan vanos. Poco a poco dejarán de intentarlo siquiera.

Mantenimiento del secreto

La manipulación y la amenaza a las que son sometidas las víctimas les obliga a mantener, sobre todo en los casos de abuso intrafamiliar, una doble vida para mantener el secreto.

Acomodación

Si el abuso se prolonga en el tiempo, el menor poco a poco irá asumiendo el papel de pareja del agresor.

Revelación espontánea o forzada

Cuando se llega a la revelación, suele ocurrir con un igual, pudiéndose producirse bien de manera espontánea o bien forzada por un adulto al valorar los indicios.

Retracción

Si no hay una intervención efectiva, e incluso cuando la hay, la retracción es frecuente, por culpa, vergüenza o miedo.

Impotencia

Las víctimas de abuso sexual generan un fenómeno de indefensión aprendida, ya que sus intentos por evitar el abuso resultan vanos. Poco a poco dejarán de intentarlo siquiera.

Mantenimiento del secreto

La manipulación y la amenaza a las que son sometidas las víctimas les obliga a mantener, sobre todo en los casos de abuso intrafamiliar, una doble vida para mantener el secreto.

Acomodación

Si el abuso se prolonga en el tiempo, el menor poco a poco irá asumiendo el papel de pareja del agresor.

Revelación espontánea o forzada

Cuando se llega a la revelación, suele ocurrir con un igual, pudiéndose producirse bien de manera espontánea o bien forzada por un adulto al valorar los indicios.

Retracción

Si no hay una intervención efectiva, e incluso cuando la hay, la retracción es frecuente, por culpa, vergüenza o miedo.